Entre los objetos en venta había cuatro esculturas de médicos pilares en enfermería, nutrición, ginecología y la lucha en contra del cáncer
Dos meses después de que la oficina de Jorge Alcocer, secretario de Salud, pusiera a la venta esculturas en honor a cuatro médicos que son pilares de la medicina en México en la enfermería, nutrición, ginecología y la lucha contra el cáncer, así como dos copias de pinturas de Rafael Coronel y el óleo original del exsecretario José Ángel Córdova Villalobos, el gobierno de la Cuatroté reculó y se desistió de ponerlos a la venta para generar ingresos al Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (INDEP).
Las esculturas, catalogadas como “bienes artísticos y culturales”, fueron adquiridas en 2018 para festejar el 75 aniversario de la creación de la Secretaría de Salud. Sin embargo, a inicios de este año formaban parte del inventario de 727 equipos de laboratorio, médico, informático y mobiliario que la oficina del secretario pensaba poner a la venta en el primer trimestre del año como parte de su proceso de mudanza a Acapulco.
Esto, en medio de la cruzada del presidente López Obrador para recuperar el patrimonio nacional que se vende en el extranjero e impedir que los bienes culturales se sigan comercializando.
En febrero, El Sol de México solicitó a la dependencia información sobre la venta del patrimonio cultural asignado a la oficina de Jorge Alcocer. El área de Comunicación Social respondió en ese entonces que las piezas eran “copias” y sólo se identificaban dos pinturas de Rafael Coronel, un paisaje de “E. Benites y otra más de M. Aless”.
Aunque insistió en que las esculturas y pinturas “no son consideradas acervo cultural por tratarse de reproducciones sin valor artístico”, señaló que no se pondrían a la venta “aun cuando no se trata de piezas originales”.
Incluso, la dependencia federal trató de corregir al señalar que el proceso de venta “no se trata de una adjudicación, sino de una propuesta de disposición final”, y que más bien puede ser sólo una transferencia del dominio a otra unidad administrativa, es decir, “para que alguna dirección general conserve dichas piezas sin necesidad de que haya una venta de las mismas”. Un mes y medio después, la Unidad de Administración y Finanzas de la secretaría modificó su Programa Anual de Disposición Final, en el que eliminaba de esta relación de bienes a la venta cada una de las nueve piezas artísticas, reconociendo que eran utilizadas para decoración de la Oficina del secretario y formaban parte del “acervo cultural” del país.
La SSA, que se encuentra en mudanza hacia su nueva sede en Acapulco, Guerrero, informó que ahora el óleo del exsecretario de Salud en la administración del panista Felipe Calderón, José Ángel Córdova Villalobos, valuado en 10 mil pesos, “será colocado en la nueva sede”.
LAS OBRAS
Las nueve piezas artísticas tienen un valor en inventario de 668 mil 750 pesos.
Las esculturas de los cuatro médicos tienen como fecha de adquisición el 24 de octubre de 2018, tan sólo mes y medio antes de concluir la administración del expresidente Enrique Peña Nieto.
Cada una de ellas tiene un valor en inventario de 162 mil 400 pesos y fueron presentadas en la ceremonia de conmemoración del 75 aniversario de la Secretaría de Salud.
La primera escultura corresponde a la doctora Julieta Calderón Gene de Laguna, fallecida en 2001 y quien es reconocida como una luchadora contra el cáncer de la mujer. Fundadora de los laboratorios en el Hospital de la Mujer, en el Instituto de Cancerología y el 20 de Noviembre. De hecho, en el primer año de la administración lopezobradorista su imagen fue tomada por la Secretaría de Salud durante el 8M para exaltar el papel de las mujeres en la medicina.
La segunda es de Luis Castelazo Ayala, quien falleció en 1984, con una destacada trayectoria en ginecología, razón por la cual el Hospital de Ginecología y Obstetricia número 4 del lMSS lleva su nombre.
La tercera escultura corresponde al médico Donato Alarcón Segovia, experto en el área de reumatología y nutrición. Falleció en 2004. Desde muy joven se integró como investigador al Instituto Nacional de Nutrición, en donde encabezó diversos estudios sobre el perfil de alimentación de la población. Llegó a ser director de ese lugar, galardonado en las asociaciones de su especialidad.
La última de las esculturas está dedicada a la enfermera María Elena Maza Brito, fallecida en 1930 y reconocida como una de las pioneras de la escuela de la enfermería mexicana. Por su labor, la escuela de esa especialidad lleva su nombre en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán.
BIENES A LA VENTA
Según el Programa Anual de Disposición Final de los Bienes Muebles inicial de la SSA, para el ejercicio 2022 había 24 mil 494 bienes que se iban a desincorporar de las oficinas centrales de esa dependencia a partir de la mudanza a Acapulco, pero también de instituciones ligadas como hospitales, las comisiones de salud y los institutos nacionales.
Con la corrección, además de sacar de la venta las nueve piezas artísticas también se eliminó el tomo 2 del libro de práctica de anestesiología de 1983 y tres vehículos que estaban duplicados. El resto sigue vigente. Se trata de más de 24 mil bienes, pero sólo siete mil 471 son para la “enajenación (venta)”. Estos pertenecen a 33 oficinas diferentes, entre ellas, la del secretario Alcocer Varela.